«Nos convertimos en el asesor más caro que tiene nuestra empresa»
Los propietarios de despachos profesionales debemos de empezar a pensar y actuar como empresarios.
Nuestro día a día consiste en ver, estar y asesorar a personas que quieren poner en marcha una empresa pero que no se ven a ellos mismos como empresarios o emprendedores. Es más, muchas veces ni siquiera se sienten cómodos con estos términos y se identifican con un perfil técnico bueno que ha tomado la decisión de emprender. Y algo similar es lo que nos sucede a los que encabezamos despachos profesionales.
«Tenemos la oportunidad de crear»
Creo que no hay asesorías clasificadas de extraordinarias porque sus dirigentes están enfrascados en funciones de expertos y huyen de lo que implica emprender o innovar.
Estamos en un sector súper especializado, normalmente liderado por grandes expertos fiscalistas. Sus despachos han ido creciendo por su buen hacer y la dirección de la empresa se ha gestionado como una banda de Jazz, en la que el propio director también toca un instrumento, en vez de como una orquesta sinfónica, en la que los dirige.
“El asesor técnico se pone a trabajar en su despacho.
El asesor emprendedor se pone a trabajar para su empresa.”
El sector de los despachos profesionales está lleno de oportunidades por explorar y mucho camino por recorrer.
Asesor técnico:
Somos muchos los directores de despachos profesionales que nos pasamos el día asesorando, preparando impuestos, atendiendo clientes y un largo etcétera. Dedicamos nuestro tiempo, nuestra fuerza y nuestra vida a trabajar y hacemos lo que sabemos hacer, sin límite. Invertimos hasta lo que no tenemos – tiempo, vida familiar, vida personal, etc. – para conseguir un objetivo que muchas veces no llegamos a reconocer.
Lo peor de todo es que así nos convertimos en el asesor más caro que tiene nuestra empresa, ya que el salario asociado suele ser el de Director General y las funciones las de un gran asesor.
Asesor emprendedor:
La diferencia con el asesor emprendedor es que éste piensa en el desarrollo de su empresa, en cómo escalar el negocio o conseguir que la empresa se administre sola, que él no se imprescindible. Dedica gran parte del tiempo a trazar estrategias para piensa en generar ingresos y evitar que sea trabajando como asesor.
¿Cuánto tiempo dedicas a ejercer de Director General de tu empresa? ¿Te sumas al cambio de mentalidad?